Personalizar el uniforme de trabajo imprimiendo, estampando o bordando el logo de la empresa resulta una buena opción, ya que permite identificar al personal de la organización y es una técnica de branding muy efectiva.

La dificultad está en elegir la técnica más adecuada para hacerlo. ¿Serigrafía, transfer o bordado?
 

Presentar una imagen corporativa coherente y atractiva refleja profesionalidad y favorece al posicionamiento de la empresa. Si la organización quiere diferenciarse de la competencia y difundir su imagen de marca, la personalización de los uniformes y vestuario laboral de los trabajadores con el logotipo o nombre de la empresa es una buena opción.

Para imprimir, estampar o bordar el logo o nombre de la empresa en las camisetas, delantales, polares, camisas u otros elementos del vestuario de trabajo existen tres técnicas: la serigrafía, el transfer y el bordado.

Conocer las características diferenciales y las utilidades de cada una de ellas nos ayudará a elegir qué técnica de personalización del uniforme laboral es la más adecuada para nuestro negocio.

La serigrafía para personalizar el vestuario laboral

La serigrafía es una técnica de impresión textil mediante la cual se transfiere tinta a través de una malla tensada en un marco, donde previamente se ha reproducido un diseño. El paso de la tinta se bloquea en las áreas en las que no hay imagen mediante una emulsión de barniz, dejando libre la zona donde pasará la tinta y en la que se imprimirá el logo o el nombre de la empresa.

Con la serigrafía se consigue un acabado depurado en la impresión, sin brillos, que tiene una alta durabilidad y es resistente a los lavados.

Esta técnica permite imprimir grandes superficies, como por ejemplo la parte trasera de una camiseta con un eslogan.

El transfer para imprimir en los uniformes de la empresa

El transfer, o también llamado vinilo, es una técnica de impresión en la cual no se estampa la tinta directamente en el tejido, sino en una lámina de papel siliconado que queda pegada a la prenda. Con una plancha térmica se fija el diseño en los uniformes de trabajo y en el vestuario laboral.

Serigrafía y transfer: las técnicas de impresión más versátiles

Tanto la serigrafía como el transfer o vinilo son las técnicas más versátiles para personalizar los uniformes empresariales, ya que se adaptan a todo tipo de vestuario laboral (camisetas, polos, gorras, polares, etc.) y a casi todos los tejidos (algodón, poliéster, sarga, etc.).

La serigrafía no debe usarse en la impresión de prendas plastificadas (que contengan PVC), ya que el calor del proceso de secado podría malmeter la prenda.

El bordado para tejer el logo en el uniforme de trabajo

Como ya es sabido, el bordado es la técnica que consiste en decorar mediante hebras textiles una superficie flexible, generalmente una tela.

Para el bordado de uniformes de trabajo y vestuario laboral se usan máquinas bordadoras industriales que utilizan el hilo como materia prima para plasmar diseños planos (casi siempre son nombres, siglas, símbolos o pequeños dibujos).

El tamaño del logo bordado o del nombre de la organización es más reducido que en la serigrafía o en el transfer. Suele situarse en la parte superior del cuerpo, encima del bolsillo delantero de la prenda, por ejemplo.

El bordado es una técnica que se adapta a un amplio abanico de prendas, aunque suele usarse para personalizar prendas con cierta distinción, como las chaquetas de chef o las batas sanitarias.

En GM7 Uniformes creemos en los beneficios de personalizar el vestuario laboral mediante estas técnicas. Por este motivo, ofrecemos un servicio de personalización de uniformes que se adapta a las necesidades de cada cliente.

Si después de leer este artículo aún tienes dudas sobre qué técnica de elegir para tu negocio, puedes contactarnos y te las resolveremos para que mejores la imagen de marca de tu empresa.